El camino que ha tomado el mundo de la moda las últimas décadas nos lleva a la reflexión de que la estética no debe perder nunca la ética.
Informes, estudios e investigaciones desde diversas organizaciones, nos han dejado claro que la industria textil es la segunda más contaminante del planeta y que además, está causando fuertes impactos sociales en países a los que llega como alma de salvación y se convierte en esclavitud para las personas que trabajan tanto en fábricas como en los campos donde se cultivan las materias primas. El proceso de deslocalización de muchas empresas, hace que lleven allí sus producciones para reducir costes y así aumentar beneficios; lo cual también repercute en las pequeñas empresas de moda que no pueden luchar en precio con ellas.
La moda sostenible viene para revertir esta situación, creando marcas éticas que aportan (además de creatividad e innovación) valores a la moda, y fomentando otras formas de consumo que priorizan la disponibilidad a la propiedad para reducir la superproducción y todos sus efectos asociados. Una moda que nos haga sentir bien por dentro y por fuera.
Por todo esto, tu opinión me será de gran utilidad para buscar nuevas formas que nos ayuden a mantener el planeta y a respetar el trabajo de las personas en cualquier parte del mundo.
Muchísimas gracias por tu tiempo y tu participación.